- Asistencia en la Vida Diaria: Ayudar en la higiene personal, incluyendo el baño, el aseo y el cambio de ropa. Asistir en la movilidad, incluyendo la transferencia de la cama a la silla, y el uso de ayudas técnicas.
Ayudar en la alimentación, ya sea mediante la preparación de alimentos o la alimentación directa. Administrar medicamentos según las indicaciones médicas.
Monitorear signos vitales básicos y reportar cualquier cambio significativo en la salud del usuario.
- Apoyo Emocional y Social: Proveer compañía y apoyo emocional, fomentando la comunicación y la interacción social.
Facilitar la participación en actividades recreativas y terapéuticas adaptadas a las capacidades y gustos de la persona.
Apoyar en la gestión de situaciones de estrés, ansiedad o confusión que puedan surgir.
- Documentación y Reportes: Registrar la evolución diaria de la persona, incluyendo observaciones sobre su estado de salud y bienestar.
Informar y coordinar con los familiares y otros profesionales involucrados en el cuidado.